dilluns, 30 de novembre del 2020

PUNTA DE LANZA (5) DOS CANCIONES

 DOS CANCIONES

Paul Anka y Stephen Sondheim, en principio, poca cosa tienen en común. Quizá lo que los ha unido en el tiempo ha sido la música, ambos compositores. Paul Anka, canadiense, un cantante melódico de los años sesenta. De su repertorio destacó en todo el mundo su número “Diana”. Pero un buen día, cuando las hadas te insuflan los vientos favorables, se le ocurrió sentarse al piano y escribir una cancioncilla que, a la postre, ha significado la melodía más escuchada y laureada del siglo XX. La letra nos habla de alguien que mira atrás, harto de los convencionalismos, que de nada se arrepiente y reafirma su manera de hacer las cosas, prescindiendo de los demás. “Arrepentimientos he tenido muy pocos como para mencionarlos/ Hice lo que tenía que hacer y llegué al final sin deber nada a nadie/Planeé cada ruta a lo largo del camino/ Y más, mucho más que esto/ lo hice a mi manera”

Stephen Sondheim, neoyorquino, prestigioso compositor de bandas sonoras y asiduo de los estrenos en Broadway. En una ocasión fue reclamado ni más ni menos que por el gran Leonard Bernstein para que pusiera en marcha el texto del musical  “West Side Story”. El éxito mundial fue alucinante. En menor medida todavía funciona hoy. En este caso ya no fueron las hadas, solo su maestría. También se sentó al piano un día de vientos de Virginia y el resultado no fue otro que “Send in the clowns”. “Pensé que querías lo que yo quiero/cariño/ pero dónde están los payasos/ Tendría que haber ya los payasos”. Ambas canciones hablan de las dudas y los desengaños al final del camino haciendo un guiño al pasado.

 

Corolario: Ambas partituras no tardaron en llegar a las manos de Frank Sinatra convirtiéndolas de inmediato en éxitos mundiales sin parangón. Excuso subrayar que ambos músicos se pudieron bañar en oro líquido gracias a los derechos de autor. I Franky, más.

dimecres, 11 de novembre del 2020

PUNTA DE LANZA (3) Muermos.

 

Lejos de atisbar señales o indicios de que algo insospechado pueda dar algo de color y calor a nuestras vidas, las cosas siguen igual, si no peor.

Veo que la Generalitat ha dado un paso al destinar 20 millones de euros a los autónomos catalanes. Decisión valiente y necesaria. Este sector, como casi todos, está en plena bancarrota. Quizá habría que ponerle un pero, un pequeño desliz. Se ha beneficiado a diez mil autónomos con la percepción de dos mil euros cada uno, pero resulta que el señor que hizo las cuentas cometió un error. Al parecer en Catalunya hay unos 450.000 de ellos, lo que quiere decir que 410.00 han quedado en la cuneta. Y como se da el caso de que, si le das de palos cabeza abajo al gobierno, no cae ni caspa. Vuelva otro día. Por si eso fuera poco la seguridad social los apremia a pagar la cuota mensual, bajo apercibimiento de sanción. Ahí queda eso.

Se está celebrando el juicio a los terroristas supervivientes del atentado de La Rambla y Cambrils, el 17 de agosto de 2017. A la vista de sus propios vídeos, mientras se dedican a la noble causa de preparar la siembra de sangre y terror en las calles, se les ve en grupo sentados y con actitud campechana, como señoras cosiendo en la calle. “Alá nos ha escogido entre millones de hombres para haceros llorar sangre”, “Venid, venid, os arrepentiréis de haber nacido, sobre todo vosotros, Mossos d’Esquadra”,”Alá nos ha prometido el paraíso, y a vosotros el infierno; os arrepentiréis de haber nacido”. Si me permiten me voy a tomar una copa de cava a la salud de los Mossos, gracias a su celeridad y valentía limpiaron las calles de podredumbre.

Última hora, Donalt Trump se empecina en no querer abandonar el despacho Oval. Me he puesto en contacto con el servicio secreto yanqui para ofrecerles una carretilla de las de sacar muermos y gordinflones fashion. Voy por la segunda copa de cava.

Nos vemos.  

dimecres, 4 de novembre del 2020

PUNTA DE LANZA. Huelva (2)

Se supone que a estas horas todo el planeta está pendiente de las elecciones presidenciales en USA. También hay que suponer que a cientos de millones de personas les importa una higa lo que pueda acontecer en el solar de los yanquis. Craso error, la influencia de las grandes potencias en los demás países del globo no se ve, pero se nota. Depende de la orientación de su política económica puede hacerle perder su puesto de trabajo, hasta aquí llegamos. Seguramente se trata del eufemismo que hemos dado en llamar globalización. Trump es un vaquero del salvaje oeste, un Clint Eastwood, que de un escupitajo puede cegar una serpiente cascabel. Biden es un hombre de concordia con un sólido conocimiento de los entresijos de la Casa Blanca. Dios proveerá, pero de notar, se notará. Y en este nido de serpientes llamado España, no vean.


Malos augurios para los países de la vieja Europa. El islamismo más cruel y sanguinario vuelve a campear a sus anchas sembrando de muertos y sangre las calles. Nadie está a salvo, nadie. París, Lion, Niza y Viena han sido las primeras víctimas de esta nueva tanda de terror. Recuerdo con nostalgia mis viajes por toda Europa, donde todo era placentero, sorprendente y, si cabe, espectacular. En paz. Hoy no sería capaz de ir ni a Marsella, ni a Perpiñán. Claro que ahora tenemos el temido y puto virus, agravio a sumar para no desplazarse. Con tal de no viajar, no lo haría tampoco a Huelva, que está más cerquita. Por las calles de esa ciudad transitaba ayer un tío apodado el mexicano con una bolsa de plástico que contenía una cabeza humana, así, como suena. Detenido ya, se ha podido saber que el mexicano tenía algunas diferencias con el individuo al que decapitó.  Ya me contaran, bajas tú de noche con las alpargatas recosidas y tu bolsita de orgánica y al abrir el contenedor te encuentras con una sonrisa dentro de una bolsa. Nada, que no salgo ni por error, ni a Huelva, ni a París ni al salvaje oeste.

Nos vemos.